A la Meseta del Somuncurá la construyen sus habitantes, respetuosos del entorno natural. Sin embargo suelen ser invisibilizados. Ellos y ellas encontraron en el turismo una reivindicación de su cultura.
(CuatroCaminos) Hacé este ejercicio.
Poné en tu buscador de internet el nombre Meseta del Somuncurá. Revisá los primeros tres resultados, leelos.
Todos ellos hablan de soledad; ubicaciones según paralelo; kilómetros de extensión; tierra despoblada. Si bajás un poco más, entonces te encontrás con términos como misterio y leyendas. ¿no sentís que le falta algo?
Rara vez las publicaciones promocionales de la Meseta de Somuncurá hablan de su gente, pobladores y pobladoras amantes de la tierra que habitan. Tampoco hablan de la diversidad de ofertas turísticas.
La visión generalizada que existe sobre la Meseta del Somuncurá es la de tierras infinitas sin conquistas, deshabitadas, inhóspitas, áridas y rígidas. La información que hoy se distribuye en la web mantienen la misma lógica narrativa con la que se gestaron, siglo y medio atrás, las campañas al desierto: la invisibilización de su gente.
Acá te queremos contar otra historia.
Desde hace 15 años, los habitantes de diferentes comunidades de la denominada Línea Sur (región) ofrecen circuitos de recorridos por la Meseta del Somuncurá. Un espacio amplio, protegido por ley como Área Natural por su fauna y flora endémica.
Las excursiones rurales incluyen el conocimiento de los diferentes parajes, sus habitantes y sus economías. Su propio acervo cultural.
Hace mas o menos de un lustro que además ofrecen al viajero la posibilidad de alojamiento y gastronomía típica. Ellos y ellas construyen la Meseta del Somuncurá como destino turístico y remarcan en cada una de las visitas la necesidad de no generar mayor impacto en la naturaleza. Una mirada atada a la cosmovisión de los pueblos originarios, esos que las Campañas “al desierto” intentaron eliminar y diezmaron en una de las masacres mas cruentas de nuestro país..
En el turismo, ellos encontraron una forma de reivindicación de sus raíces y su modo de vida íntimamente ligado a las inclemencias del clima.
Javier Luquet es el Presidente de la Cooperativa de Turismo Valcheta Alen. En diálogo con Cuatro Caminos nos contó que trabajan “para poner en valor el destino y cuidar los recursos”.
Que con esa misma visión, se agruparon varios emprendimientos turísticos en la Asociación Civil Turismo Región Sur y en red ofrecen al viajero diferentes paquetes.
- En la localidad de Ministro Ramos Mexía está el complejo Tunquelén, lugar de descanso y descubrimiento.
- En Ingeniero Jacobacci uno de los principales atractivo es La Trochita o el Viejo Expreso Patagónico, una formación férrea de trocha angosta que fue construida para unir la Provincia de Río Negro con Chubut en 1921 y que actualmente hace su recorrido hasta Ojo de Agua (Ñorquinco).
- En Los Menucos la Meseta infinita, la cultura local se enlaza con la extracción de piedra Laja, un recurso mineral típico de la región.
- En El Cuy, La Margarita la ruta de la lana te ofrece redescubrir el acervo cultural ligado a su principal economía, la cría, pastoreo y esquila de ovejas.
Todos ellos, son emprendedores independientes se unieron para conocerse, pero también para dar a conocer sus iniciativas. A falta de apoyo institucional gubernamental para fomentar el turismo en la zona, además se unieron –a nivel nacional- a la Red de Turismo Rural Comunitario (RADTUR), de la cuál hoy son parte del Comité Directivo.
“Ofrecemos turismo rural de tres días, dos noches con circuitos incorporados a las áreas naturales protegidas. Cuidamos el ambiente, somos una organización que trabaja en el turismo sostenible”, afirma Luque.
“Llevamos todo en nuestros vehículos, tenemos cocineros y guías. Nos turnamos para ofrecer el mejor servicio posible en las excursiones, así como alojamiento rural en plena meseta”
La gastronomía es un capítulo aparte.
No se trata solo de ofrecer los productos típicos de la región (carne de chivo, cordero, embutidos y dulces), sino de integrar a los viajeros al proceso de producción.
“Tratamos de impulsar lo nuestro, las raíces, la cultura. Por ejemplo hacemos la Torta Recoldo a la vista del viajero , es un proceso comunitario que compartimos con ellos, para que se sientan parte y disfruten esa estadía, en donde parte importante es la convivencia”.
Para lograr ser un destino sostenible tienen una premisa: las excursiones se ofrecen por fines de semana se realizan en grupos reducidos de entre 6 y 8 personas máximos.
Ingresar a la enormidad de la meseta requiere ante todo, por seguridad pero también para poder tener una gran experiencia de viaje, hacerlo con personas que en verdad conocen el lugar. La Meseta del Somuncura son esos lugares a donde no se pude pensar simplemente en ir “por cuenta propia” alejándose de las redes comunitarias. Es por ello, que no sólo viajeros se acercan a solicitar las excursiones, lo hacen también muchos habitantes de las localidades que existen al pie de ese territorio vasto.
Reseña para neófitos
Una meseta no es una sierra ni una montaña, pero tiene altura. Particularmente, esta de la que estamos hablando cuenta con territorio repartido entre las provincias de Río Negro y Chubut. Son 15 mil kilómetros y 10 mil respectivamente de territorio extendido.
Al pie de la Meseta, en la provincia de Río Negro, hay una serie de pueblos y parajes que se unen por la ruta nacional 23 y la línea del ferrocarril del Tren Patagónico. No son solo caminos, son ante todo parte de la identidad del lugar.
Esa conjunción de ruta y pueblos se la conoce como Línea Sur. Son 605 Kilómetros lineales de recorrido, aunque el territorio total de los nueve municipios que la componen -Pilcaniyeu, Ñorquinco, Comallo, Jacobacci, Maquinchao, Los Menucos, Sierra Colorada, Ramos Mexía y Valcheta- abarcan el 62 por ciento del territorio rionegrino.
Entre sus atractivos más destacables, además de la cultura autóctona, sus habitantes y su gastronomía, están el paisaje de vasto territorio, lagunas, flora y fauna de la estepa, artesanías y restos fósiles arqueológicos y paleontológicos.
La ruta Nacional 23 nace en la intersección con la Ruta Nacional 3 (esa que recorre medio país desde CABA hasta el fin del mundo) a la altura del kilómetro 1178, para desembocar, luego de mas de 600 km en la ciudad de San Carlos de Bariloche, sobre ruta Nacional 40.
Valcheta es la primera de las localidades en línea y está a 268 kilómetros de distancia de Viedma, capital rionegrina. A 107 kilómetros de Las Grutas y a 310 de Puerto Madryn. Es además una de las de
Sur, Este, medio y oeste. Cuatro caminos que bordean la maravillosa Meseta del Somuncurá, el destino emergente por excelencia de la Provincia de Río Negro.
Ficha técnica
Época ideal para visitar la meseta: desde octubre hasta abril son los momentos ideales para conocer la meseta. Luego el invierno suele presentarse con temperaturas extremas.
Caminos y transporte: La ruta nacional 23 se encuentra en buenas condiciones generales. 500 kilómetros están asfaltados y 105 son de ripio. Los tramos se van alternando a lo largo de todo el camino. El estado de los sectores de ripio varía por lluvia, viento, cantidad de autos que circulan entre otros.
El Tren Patagónico funciona con normalidad, aunque con aforo reducido. Sale todos los viernes a las 18 horas desde la ciudad de Viedma y arriba a San Carlos de Bariloche los días sábados al medio día. Regresa los días domingos.
Conexión WIFI solo para SOS
Existen 23 Puntos a lo largo de todo el recorrido, aunque no siempre todos funcionan. Estos son los puntos: KM 1; KM 20; KM 35; KM 161; KM 212; KM 238; KM 257;KM 310; KM 325;KM 361; KM 373; KM 399; KM 450; KM 487; KM 519; KM 542; KM 567; KM 588
Estaciones de servicio: encontras en las localidades de Dina Huapi (AXION); Jacobacci (YPF); Maquinchao (YPF);3) Los Menucos (YPF); y Valcheta (YPF).
La información precisa y actualizada al momento (te conviene hacerlo a poco de partir) la podes consultar en la página Ruta Nacional 23-RN23- Novedades
https://www.facebook.com/messages/read/?fbid=243395589092865#fua